jueves, 20 de septiembre de 2018

UN TESTIMONIO DE ENCUENTRO CON DIOS


Mañana, viernes, en el edificio renacentista del Ayuntamiento de Llìria a las 7:30 de la tarde se presentará el libro Josep María Jordán Galduf "El rumor de la fe, un camino de búsqueda personal". Editado por una pequeña pero emprendedora editorial de Llìria, a mí me cabe el honor de ser el presentador. ¡No todo es música en la antigua Edeta!

Con un buen estilo literario -y eso que su autor escribe y se expresa habitualmente en valenciá - el que fue alcalde de la izquierda y catedrático de economía, nos narra la historia espiritual de su alma, su actitud de búsqueda, de su humanismo entendido como servicio al ser humano. Saldrá de su agnosticismo relativo, y al final de este camino, que recorremos con él gracias a la lectura de su libro, se abre a la trascendencia, al encuentro con Jesús de Nazaret. Es un testimonio admirable, impagable. Os recomiendo vivamente la lectura éste libro -es una biografía del alma- que por ser breve, nos deja con más ganas.

DESAPARICIONES Y APARICIONES



La izquierda y la derecha y también los progresistas y conservadores andan estos días aunque ya tiempo ha que lo hacen, manifiestamente mirando hacia atrás. Ni miran el presente ni escrutan el futuro, les preocupa únicamente el ayer.

Reaparece Franco, con los muertecito que está y lo quieren exhumar. Reaparece Aznar, con lo quemado que anda y hace declaraciones que nadie se cree. Reaparece la tesis doctoral de Sánchez que ya es, aunque copiada, letra muerta. Todos miran atrás, ningún político da un paso adelante, hacia el futuro, hacia lo que verdaderamente interesa a nuestro país.


"Si alguno echa el arado en tierra y mira hacia atrás, no es digno de mí…”

viernes, 14 de septiembre de 2018

LIBÉRAME DE MÍ MISMO



Aquí estoy Señor, doblado 
como un signo de interrogación 
que espera la respuesta 
al ritmo urgente del deseo tan tirano. 
Endereza mi pregunta y hazla
un signo de admiración agradecida.

Aquí estoy Señor, 
hueco como la palma de la mano, 
hecha un cuenco para recibir el agua 
sin demora. 
Distiende mis dedos de mendigo ansioso 
en un ágil gesto de baile y alabanza.

Aquí estoy Señor, 
curvado como un anzuelo 
que busca afilado 
con su seguridad de acero 
la presa tangible como pago justo
a su esfuerzo tenso. 
Ablanda mi rigidez 
     en el suave mecerse del sedal sobre las olas.

Aquí estoy, Señor, acogiendo tu don,
la alegría y la paz de tu misterio.

Benjamín González Buelta, sj

jueves, 13 de septiembre de 2018

EL INICiO DE LA TOLERANCIA



"Ten cuidado; ten cuidado de no cerrar nunca tu corazón a nadie y empieza por comprender tu conciencia"
(Pedro Fabro, uno de los primeros jesuitas).

martes, 11 de septiembre de 2018

¿NECESITA LA IGLESIA UN NUEVO CONCILIO?


Juan Arias, columnista de EL PAÍS, (ver acertado artículo del domingo pasado) ante la magnitud del escándalo que se cierne sobre la Iglesia Católica a raíz de los numerosos casos de pederastia encubiertos y ante las furibundas dentelladas que algunos cardenales y obispos (que dicen amar mucho a la Iglesia pero que temen apearse de sus privilegios) propinan al Papa Francisco, sugiere una salida para éste donde la solución de esta grave crisis de la Iglesia no recaiga sólo sobre los hombros heroicos del Papa, sino que éste convocara un concilio general de toda la Iglesia. Éste debería afrontar las grandes reformas que, como un coloso, Francisco está intentando llevar a cabo contra viento y marea, con la resistencia de la curia y del clero conservador y tradicionalista. 
Lo hizo Juan XXIII y lo continuó Pablo VI, con grandes dolores y sufrimientos. La idea a mí me parece óptima siempre que el sugerido Vaticano III, fuera como debiera ser: fiel al mensaje siempre abierto y liberador del Evangelio de Jesús. Por de pronto, adelante, Papa Francisco. ¡Me duele la Iglesia!

sábado, 1 de septiembre de 2018

ESPLENDOR EN LA HIERBA



“Aunque el resplandor que
en otro tiempo fue tan brillante
hoy esté por siempre oculto a mis miradas.
Aunque mis ojos ya no
puedan ver ese puro destello

Que en mi juventud me deslumbraba
Aunque nada pueda hacer
volver la hora del esplendor en la hierba,
de la gloria en las flores,
no debemos afligirnos
porqué la belleza subsiste siempre en el recuerdo. (...)
       
“Aunque el resplandor que
en otro tiempo fue tan brillante
hoy esté por siempre oculto a mis miradas.
Aunque mis ojos ya no
puedan ver ese puro destello

Que en mi juventud me deslumbraba
Aunque nada pueda hacer
volver la hora del esplendor en la hierba,
de la gloria en las flores,
no debemos afligirnos
porqué la belleza subsiste siempre en el recuerdo. (...)

William Wotrsword.