Francisco, Papa, "dixit"
"¡Pecador si, traidor no! Y ésta
es una gracia: permanecer hasta el final en el Pueblo de Dios. Tener la gracia
de morir en el regazo de la Iglesia, en el regazo del Pueblo de Dios. Y éste
es el primer punto que quisiera subrayar.
Pedir también
para nosotros la gracia de morir en casa. Morir en casa, en la Iglesia. ¡Ésta
es una gracia! ¡Esto no se compra! Es un
regalo de Dios y debemos pedirlo: ‘Señor, ¡hazme
el regalo de morir en casa, en la Iglesia!'. Pecadores sí, ¡todos,
todos lo somos! Pero traidores ¡no! Corruptos ¡no! ¡Siempre
dentro! Y la Iglesia es tan madre que también
nos quiere así,
tantas veces sucios, pero la Iglesia nos limpia: ¡es
madre!".
No hay comentarios:
Publicar un comentario