Peregrinación a Santo Espíritu del Monte

La llegada de los peregrinos

El sábado pasado, estuve haciendo la peregrinación a un santuario que el proyecto pastoral del Itinerario Diocesano de Renovación recomienda. Aun cuando vinieron sólo alrededor del 30 por 100 de lo que forman parte de estos grupos, fue una gran satisfacción el día de convivencia y religiosidad que se vivió. Unas cien personas fuimos  pues al Monasterio (convento) de Santo Espíritu del Monte, en un paraje encantador de la sierra Calderona.

Uno de los grupos en diálogo

Allí acudieron también el Vicario Episcopal, algunos sacerdotes del arciprestazgo. Antes, desde mi parroquia de Los Ángeles en el Cabañal, se bendijo a los peregrinos y después de algo más de media hora llegamos  al convento de los franciscanos y en los espacios libres del bosque de pinos que rodea al monasterio, repartidos en grupos heterogéneos, los componentes del Itinerario,  hicieron una mesa de diálogo donde intervinieron todos contando su experiencias, inquietudes y proyectos.

Después se celebro la eucaristía en el templo del monasterio. La mesa del Pan y del Vino se continuó en mesas de compartir, comiendo juntos de picnic otra vez en la pinada. El clima nos acompañó. Ya a las cinco de la tarde se regresó. Todos muy contentos. “Chapeau” por los animadores responsables que lo organizaron todo de maravilla.

Para mí fue una experiencia agridulce, porque junto a la satisfacción de ver que todo había salido muy bien, a mi me desapareció mi alba, mi estola, mi  e-book y mi agenda y mi bocata de jamón. ¡Un descuidero se los llevó!.

La foto del grupo