Todas las mañanas, al abrir mi periódico habitual, lo hago por la página donde aparece la viñeta cotidiana de Forges. Una sonrisa, una lagrima o un gesto de enojo se mostraba en mi rostro. Muchas de esas viñetas valían más que una editorial o un sesudo artículo del periodico. El matrimonio maduro y sus diálogos, don Quijote y Sancho, Blasillo o las abuelas del pueblo, Mariano y Concha, algunos de sus personajes, me han ido transmitiendo lo que cada día los españolitos de a pie gozamos, pensamos o sufrimos. Duro y tierno a la vez, sus dibujos transmiten un humor solidario y lleno de misericordia. “¡Y no te olvides de Haití!" Escribía continuamente en un ringón de sus viñetas. Era un humor de un hombre solidario, misericordioso.
Antonio Fraguas, "Forges", ha fallecido esta madrugada, por causa de un cáncer. Descanse paz. Dios, ese señor gordito,de pelo rizado y blanco (más parecía un abuelito de peluche) con su triángulo en la cabeza como él lo dibujaba, estará partiéndose de risa ahora mismo con él.
Gracias, Forges, porque con tu ingenio, nos has ayudado a vivir cada día con menos pesadumbre, con una sonrisa y también con más sentido del humor. .
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