Como si fuéramos labradores oteando el horizonte en tiempo de sequía, aquí andamos todos pendientes de los parte meteorológicos que dicen sobre la lluvia que ni sí, que ni no, sino todo lo contrario. Sospecho que su ambigüedad nos es por el caprichoso movimiento de las borrascas primaverales, sino porque ellos deben estar a mínimos, con el meteorólogo de guardia porque también andarán de vacaciones.
Así que tendremos paciencia y esperaremos que todas las cofradías puedan desfilar al menos una vez. Yo mientras tanto, con mis procesiones. Con la de hoy, ya tengo cumplidas cuatro.
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