viernes, 31 de diciembre de 2021

AÑO VIEJO, AÑO NUEVO

 


Siempre estos días de transición del cambio de año me han provocado una gran melancolía. Es la experiencia del tiempo que pasa y la amenaza de que todo tiene que terminar. Pero no por eso voy a dejar de desear que el futuro año sea mucho más venturoso que el pasado que hemos sufrido. Os dedico pues este poema que hoy he escrito.

 

                 EL ÚLTIMO DÍA DEL AÑO 

Te parece que has llegado 

hasta el último día de este año infinito,

como se fuera una altísima cima escalada.

Y, sin embargo, es él quien hasta ti ha llegado 

con el silencio de una serpiente ignota, 

con el sigilo de un escorpión furioso. 

Pues no son tus pies los que te han llevado

ni siquiera el pulso de tus venas,

ni el alterado pálpito de tu corazón.

Enseguida pretendes hacer balance 

y como si fueras un viejo tendero, 

ponderas cuál es su peso, 

cómo es su textura, 

y cuál es la ganancia. 

No sabes que es él quien te ha conducido

 por estos caminos de extravío

Solo él sabe qué es lo que ganar has podido,

y qué pérdidas lamentables te ha dejado. 

¡Oh tiempo, quién te tuviera prisionero! 

… Y en la boca reseca, con regusto cansado, 

la sed que nunca cesa.

Tal vez mañana, tal vez mañana

 brote el agua fresca 

y el hombre reviva su esperanza. 

miércoles, 29 de diciembre de 2021

BECKET O EL HONOR DE DIOS

 


Hoy día 29 de diciembre es para mí un día especial por cuanto se celebra el martirio de Santo Tomás Becket, uno de mis santos favoritos y un verdadero gigante de la Iglesia, a la que defendió de las injerencias del poder civil sobre ella. Beckett nació en 1118 en Londres y murió asesinado en la catedral de Canterbury por cuatro esbirros del rey Enrique II, cuando aquel rezaba las vísperas.

En su juventud había sido muy amigo del príncipe que sería después Enrique II. Con el participó en juergas y francachelas. Pero cuando fue nombrado arzobispo de Canterbury, se convirtió en otro hombre, sumamente creyente y piadoso y optó por defender a la Iglesia del poder absoluto que quería poseer el rey. 

Después de su asesinato fue casi de inmediato declarado santo y mártir y todo el pueblo en Inglaterra iba a venerar su sepulcro. También el rey homicida tuvo que llegarse hasta allí para hacer penitencia y pedir perdón por aquel asesinato. A mi me recuerda a dos otros grandes testigos de la fe enfrentándose al poder civil: en el siglo XVI, santo Tomás Moro, canciller de Enrique VIII, rey de Inglaterra que lo mandó decapitar y ahora en el siglo XX, monseñor Romero y el presidente del gobierno de El Salvador. Como Becket, también San Óscar Arnulfo Romero murió asesinado al pie del altar.


La admiración por Tomás Becket ha tenido repercusiones culturales y literarias importantes. En los “Cuentos de Canterbury” los peregrinos se dirigen a la catedral para ver y venerar el relicario del santo. Y más modernamente el gran poeta T.S. Eliot escribió un drama teatral titulado “Asesinato en la catedral” que yo he tenido la suerte de contemplar representado y, más tarde, Jean Anohuil escribió también para el teatro “Becket o el honor de Dios” que fue adaptada al cine con el título de “Becket” en 1964 con la maravillosa interpretación de Richard Burton en el papel del arzobispo y Peter O’Toole en el de su antagonista, el rey. También aparece el tema del asesinato de este Arzobispo en la famosa novela de Ken Follett, “Los Pilares de la Tierra”.

martes, 28 de diciembre de 2021

SUCCESSION: ¿SON LOS RICOS FELICES?


Succession: retrato feroz del capitalismo neoliberal.

 

Llevo varias semanas que estoy viendo a pequeñas dosis la serie que emite la plataforma HBO sobre una familia rica y poderosa que posee todo un trust de medios de comunicación. No suelo ver muchas series porque me fatiga mucho cuando me veo “enganchado” y a mí el formato de las películas clásicas del cine (1 hora y media o dos) me parece el ideal, Pero las series son ahora el sustituto de los grandes relatos novelescos del siglo XIX que por ejemplo, Víctor Hugo o Dostoyevski o Galdós escribían para periódicos y revistas.


De “Succession”, se han emitido ya tres temporadas con diez u once episodios cada una. Prometen una cuarta temporada. Un padre (magnate de los medios) magistralmente interpretado por el gran actor Brian Cox y cuatro hijos con sus yerno y sobrino, se llevan a matar para ver quién es el sucesor de ese imperio mediático. Todo en la realización es perfecto y no escatima ningún medio recurso en la puesta en escena. Guión, actores, escenografía, diálogos, fotografía y también una banda sonora musical muy buena. El patriarca de esta historia está inspirada en Rupert Murdoch, el propietario de la Fox.

 

A mi me recuerda al “Rey Lear” de Shakespeare también a “Ciudadano Kane” de Orson Welles y como no, aquellas series antiguas llamadas “Dinastía”, “Falcon Crest”. Sus personajes, que para algunos son héroes, monstruos genios demonios o villanos pero que en su mayoría están perdidos, caminan aturdidos por el túnel de la existencia. Destilan todos un egoísmo abismal, una avaricia insaciable, un deseo de poder y manipulación desenfrenado. Sólo el dinero les mueve. Los personajes en los primeros capítulos son tan odiosos que tientan a abandonar la serie pero en cuanto se pasan los dos primeros capítulos, son gente que parece que cuenten ya en tu vida cotidiana.


Una revista de cine internacional “Sofilm” le ha dedicado todo un número 

considerándola con una de las grandes series de la historia de la televisión.

 

sábado, 25 de diciembre de 2021

LA NAVIDAD DE JOSÉ DE NAZARETH


 LA NAVIDAD DE JOSÉ DE NAZARETH

                          ¡A tod@s los que celebráis la Navidad!

Se incorporó de su camastro
José, el bueno, el justo,
y despertó de aquel sueño,
sobresaltado por la pesadilla.


«-¡Arriba, corre, José, despierta!»,
-la voz de su corazón le dijo:-
Un peligro de muerte os ronda.
«Coge al niño, a su madre  y huye. 
Cierra tu taller y tu casa.
Tira la llave a lo hondo del pozo.
Durante mucho tiempo 
estarás en cuarentena. 
No volverás a pisar la acera de tu calle
ni con tu familia verás 
la silueta de las torres de tu pueblo. 
Ni mirarás desde ahora
salir el sol desde tus montes queridos!-»

..Y José, el bueno, el justo, 
se desterró de su patria amada. 
Desde aquí lo podemos ver 
con su mujer y su niño 
tragando el polvo del desierto:

fronteras y alambradas,

concertinas y metralletas

le esperan.

 

Amigos: ¡BON NADAL!

                                                    José Luis.

 

martes, 21 de diciembre de 2021

ÚLTIMA TARDE DE OTOÑO



Hoy ha acabado el otoño, y en su último día, en esta misma tarde que se ha ido, he escrito este poema. A vosotros lo dedico: la tristeza y la nostalgia del tiempo que pasa.

 

Última tarde de otoño.

 

Un libro abierto en la repisa de la ventana

se despide, con manos blancas 

que el viento suave balancea,

de las hojas que en el suelo yacen. 

Y en la mesa, olvidada, 

una rosa ajada y sola

bebe del vaso de cristal, 

a cuyo borde se agarra 

por temor al naufragio. 

Un rayo de sol, verde y postrero

que por la ventana entra, 

parece apuñalarla.

lunes, 20 de diciembre de 2021

LA VALENCIA DEL AÑO 60

 


 

Tres años después de que el río Turia inundara la ciudad de Valencia, se rodó en nuestra ciudad una película inglesa titulada “El chico que robó un millón” dirigida por un prestigioso cineasta británico que dirigió "Un pez llamado Wanda" y que no llegó a estrenarse en España seguramente porque el retrato que aparecía en ella no era del agrado de los censores de la dictadura de Franco. Es para mí una verdadera joya por dos motivos: porque es una película sencilla pero muy bien realizada y también porque te facilita ver la Valencia de los años 60 que aún después de la “riuá” no había despertado. En la película casi es más protagonista la misma ciudad que el chico que la protagoniza. La historia es muy sencilla y aunque está en inglés se sigue fácilmente.

 

A mí me ha recordado en algunos momentos la obra maestra “Ladrón de bicicletas”: las andanzas de la gente sencilla humilde y pobre de nuestra ciudad. Hay secuencias verdaderamente memorables como es la persecución del ciego que se quiere apoderar del dinero o la casi terrorífica del afilador persiguiendo al niño por lugares increíbles en le Barrio del Carmen. Pero lo más admirable es que yo he visto ver aquella Valencia que existía cuando yo tenía 15 o 16 años y que aún recuerdo: el viejo cauce del río, un lugar que se veía ya muy infecto, la feria de burros que en su cauce se hacía, la fachada del Cabanyal, la Glorieta, la calle de la Paz, los viejos tranvías, la plaza redonda, etc. etc..

Sólo por eso es una gozada verla. El Latinoamérica donde se estrenó llevó el título de “El pequeño ladrón”. Os la recomiendo encarecidamente, está en YouTube en la dirección que ahora es indico. 

The Boy Who Stole a Million 1960

youtube.com

https://youtu.be/zx-aTAliWkQ 


jueves, 16 de diciembre de 2021

JOSEP MARÍA JORDÁN EN LA UNIVERSIDAD CATÓLICA

 


 

Ayer tarde tuve la satisfacción de presentar a mi amigo Pepe Jordán en la conferencia que dio en la Universidad Católica, dentro de la programación de la cátedra Barcia- Goyanes donde una vez al mes se organiza conferencias que versan diferentes temas. Pepe Jordan expuso ese itinerario espiritual que él ha recorrido a raíz de su reencuentro con la fe cristiana. Un reinicio que le llena de alegría y sentido su vida. Todo un testimonio.

 

Expuso con esa serenidad que le caracteriza, lo que escribió en sus últimos dos libros “El rumor de la fe” y “Sentir discernir”, al hilo de su búsqueda personal y de sus reflexiones. Fue sumamente interesante y los asistentes siguieron con mucha atención e intervinieron después en el coloquio sobre el testimonio personal que él había dado. Nos recordó aquello que escribió Thomas Merton: “a Dios lo encontramos cuando lo buscamos; y cuando no lo buscamos, se escapa de nosotros… Dios es todo en todo”

miércoles, 15 de diciembre de 2021

LA MUERTE DE LOS FAMOSOS

 


A mi me pone triste la muerte de los famosos. Y no de aquellos que han elaborado su fama a base de numeritos más o menos escandalosos sino de esos otros que son conocidos por su trabajo diario en el mundo de los escritores, de los artistas y de los actores. Cuando muere uno mi memoria salta a lo que ellos han contribuido a construir mi biografía cultural o sentimental. Y me duele especialmente la muerte de los famosos cuando estos fallecen a una edad relativamente temprana. Hace unos días falleció Almudena Grandes (una autora cuya escritura no me entusiasmó mucho) y ayer mismo murió Verónica Forqué con la que tanto me he reído. Parece ser que padecía una depresión que le ha conducido al suicidio. Qué pena. Tal vez estuviera viviendo esas épocas duras y amargas de los actores y actrices que van, poco a poco según la edad avanza, sintiéndose olvidados convirtiéndose en un juguete roto. Que descanse en paz.

 

No me gusta sin embargo los entierros de los famosos. Ya en el tanatorio se producen auténticas romerías de gente de su alrededor que con un una rosa en la mano y una lágrima en la mejilla afirman que eran muy amigos del finado.  Luego, en el cementerio se suele armar un “botisferio”, de gente conocida del mundo cultural, que afirman que han perdido a un gran amigo, que era un gran actor o escritor. Gafas oscuras simulan ocultar los ojos húmedos de esta gente que cuando vivían seguramente, tenían en el olvido a los que ahora lloran. ¿No se les ocurrió darles trabajo? En verdad todo esto me apena.

 

También me deja indiferente cuando el famoso que fallece después de muchos años de edad, Porque muchas veces pienso o que ya habían fallecido, y otras veces aún más maliciosomente creo que su muerte en edad tan avanzada no es más que un truco para ellos aparecer por útima vez en el primer plano de las noticias. El último fogonazo de focos lentejuelas y alfombras rojas. Es algo cruel, pero ¡c´est la vie!

lunes, 13 de diciembre de 2021

¿ES POSIBLE EL PERDON? VIENDO MAIXABEL



 Veo “Maixabel” otra vez. Su ventaja tiene: no te quedas obnubilado como la primera vez y descubres, como todas las películas de la directora vasca Icíar Bollaín, además de un ritmo algo moroso, me da la sensación que siempre oculta alguna carta marcada debajo del sentimentalismo y buen rollo que poseen. Aún cuando sus películas siempre son interesantes por los temas “calientes” que presentan ninguna de ellas levanta verdaderamente el vuelo artístico del buen cine y eso que ésta sí me parece a pesar de sus limitaciones una de las mejores. Con frecuencia los perfiles de los personajes son minas que estallan oscureciendo la película por sus faltas de credibilidad y por los subrayados continuos para indicar las buenas intenciones. Cine didáctico que se parece mucho a ese otro cine que ahora en España se hace tildado de cine religioso. Que de eso trata este tipo de cine: hacer triunfar el buenismo, a la vez que generar un discurso que es políticamente “correcto”.

 

No me creo el desarrollo personal de los etarras que piden perdón. ¿De qué? Ellos dicen todo el rato que “son unos mandados”, que estaban engañados, que la culpa última es de la organización… A mi me parece que todo es echar balones fuera.

 

Está claro que una situación social tan podrida como la que se creó en Euskadi durante tantos años no es posible sanarla de golpe. Se agradecen las buenas intenciones, los esfuerzos de los mediadores, la heroicidad de algunos que han sido víctimas… Habrá que esperar-si la situación no cambia (y parece ser que no) varias generaciones. Sí, el perdón surge cuando se recuerda la ofensa y después se olvida.

 

Blanca Portillo como protagonista está muy bien, y Luis Tosar no tanto; a mí nunca como actor me ha dicho gran cosa. La última secuencia de la película, que sospecho planificada con bastantes licencias, en la que aparecen juntos a mí me parece poco verosímil y algo cursi y melodramática.

jueves, 9 de diciembre de 2021

VICENTE SERRANO MILLET, IN MEMORIAM


 Vicente Serrano fue compañero mío de promoción. Fuimos grandes amigos. Los últimos años tuvo que estar retirado en su puebo debido a su salud delicadísima. Celebraba este año, como yo, sus Bodas de Oro sacerdotales que sin duda ahora ya las está definitivamente disfrutando junto a Dios que lo ha llamado. Falleció ayer día ocho. Pero quiero publicar la nota de recuerdo y cariño que le ha tributado Josep María Jordan en el periódico digital "La Veu de Lliria". Vicente, descansa en la paz de Dios.

LLETRES D’HORABAIXA: “EN MEMÒRIA DE VICENT D. SERRANO MILLET“, per Josep Mª Jordán Galduf 


Ahir dimecres, 8 de desembre de 2021, dia de la Immaculada Concepció de la Verge Maria, va faltar Vicent D. Serrano Millet, que fou vicari de la parròquia de Sant Francesc de Llíria al llarg dels anys setanta i era conegut també de forma molt carinyosa i popular amb el sobrenom de “Viki paraeta”. El rector de la parròquia era en aquells moments D. Alfredo Gilet, i ell hi es va encarregar particularment de la gent jove.

Vicent Serrano va nàixer a la Font d’En Carròs l’any 1946 i fou ordenat sacerdot l’any 1971 (enguany s’ha acomplit, precisament, el cinquanta aniversari de la seua ordenació sacerdotal). Pense que la parròquia de Sant Francesc de Llíria va ser la seua primera destinació com a capellà, i tenia una especial aptitud per a comunicar-se amb la gent jove. Sintonitzava i s’identificava d’una manera natural i increïble amb ells. El sobrenom de “Viki paraeta”, responia a la seua facilitat per a parar-se una llarga estona amb qualsevol jove o grupet de joves, xarrant de forma alegre i cordial.

Jo vaig conéixer Vicent Serrano l’any 1973, i estiguí connectat amb el grup de joves que ell portava a la parròquia de Sant Francesc durant un any i mig. Recorde l’afectuosa acollida que hi vaig tindre per part de, entre d’altres, Tica Cotanda, Mario Gorrea i Paco Rozalén. Ens reuníem els dissabtes després de sopar, i hi havia diverses activitats en les quals participava un gran nombre de gent. Per exemple, jo vaig promoure la representació de la coneguda obra de teatre Llama un inspector de J. B. Priestley en la qual intervingueren Carmen Abenza, Vicent Catellano, Pep Cebrià, Paco Furió, Enrique Galduf, Conxa Llopis, Pepe Mas, Eugènia Montesinos i Paco Rozalén.

Per raons professionals, la meua connexió amb el grup de joves de Sant Francesc s’anà diluint en 1974, però no així la meua amistat amb Vicent Serrano, que s’anà reforçant gradualment. Per exemple, ell em va presentar un condeixeble seu, Ismael Pons, que era aleshores capellà de Bugarra i junts col·laboràrem en distintes activitats de la JARC. D’altra banda, Vicent Serrano estigué molt present en les reunions prèvies a la creació de l’Associació de Veïns de Llíria a primers de 1977 i patí per això alguna incomprensió.

Són nombroses les promocions de xiquets i joves de la Llíria dels anys setanta que se’n recordaran de Vicent Serrano per una o altra cosa. Fins que, no sé si voluntàriament, o de manera forçada (per l’autoritat eclesiàstica), en un moment donat, a primers dels anys vuitanta, deixà la parròquia de Sant Francesc i fou destinat a l’exèrcit com a capellà castrense. Una destinació que li serví per ajudar a tants joves soldats en aquelles especials circumstàncies, ja fora al País Basc com posteriorment a Bòsnia.

A l’exèrcit va estar molts anys, fins a reincorporar-se novament a la pastoral parroquial ja entrat el segle XXI. Em passava noticies seues regularment Reme Peñarrocha, de la parròquia de Sant Francesc. I jo torní a contactar amb ell a partir de 2015 quan passà a ser rector de la parròquia Visitació de la nostra Senyora, de Real de Gandia. La salut li anava fallant progressivament, per això es va retirar després al seu poble on va morir ahir i serà soterrat avui. Descanse en pau Vicent Serrano Millet, amb el sincer afecte de tanta gent de Llíria que el recordem i l’estimem.


miércoles, 8 de diciembre de 2021

PURÍSIMA FOR EVER!



En este día de la fiesta de la Inmaculada, he ido a mi parroquia natalicia, la de San Francisco de Asís de Liria, a unirme a aquella comunidad parroquial para celebrar la fiesta de su patrona: la de Santa María, en su Purísima Concepción. La iglesia estaba a aforo completo, y tal vez el riesgo se vencía con puertas y ventanas abiertas que con el viento que corría, temblaban hasta las pequeñas llamas de las velas del altar bellísimamente adornado con flores. ¡Siete sacerdotes concelebrando y toda la comunidad viviendo con gran devoción la Eucaristía! Un coro joven, o me lo parecía a mí, ha cantado la misa de Lorenzo Perosi y en el ofertorio un tenor y una soprano han cantado el Avemaría de “Cavalleria rusticana”. Precioso.

 

Se ha acabado la celebración con ese canto especial sólo propio de esta parroquia que es el “Tota pulchra es María!”/ ¡Toda bella eres, María! Los siete curas concelebrantes nos hemos retirado cantando “Con aplauso general…” que es canción que nos traslada a nuestros años del seminario de Moncada.

 

El evento ha acabado con el sorteo de unas grandes láminas encuadradas con el rostro de la imagen de la Purísima. Y el único signo externo al que la pandemia nos iba a permitir -una gran mascletá en la plaza de San Francisco- se ha tenido que anular debido a las tempestuosidades del viento.

 

Ha sido una mañana preciosa. Yo la he disfrutado mucho y se advierte en toda la gente el creciente deseo de retornar a celebrar nuestras fiestas religiosas como antaño se hacían. Tendremos paciencia.