domingo, 25 de abril de 2021

ESTA NOCHE, LOS OSCARS


 Puede ser una paradoja: en el año más crítico del cine en toda su historia, la selección de películas que han llegado a los Oscars, como mejores, es inmejorable (valga la redundancia). Ocho cintas que no tienen desperdicio, que son sumamente interesantes y que muchas de ellas contienen bellos y hermosos discursos humanistas que señalan la búsqueda de trascendencia.

Nominadas Mejor Película en los Oscar 2021

"El Padre"
"Judas y el mesías negro"
"Mank" "Minari, historia de mi familia"
"Nomadland/Tierra nómada"
"Una joven prometedora"
"Sound Of Metal/Sonido de metal"
"El juicio de los 7 de Chicago"


Casi todas se pueden ver ya en las plataformas digitales de cine. 

¿Mis favoritas? «Nomadland»/Tierra nómada y «Sound of metal/ Sonido de metal». En la madrugada del domingo al lUnes sabremos el resultado. ¡Tampoco me quitará el sueño!


viernes, 23 de abril de 2021

CINE Y TEOLOGÍA

 


Música religiosa, arte religioso, cine religioso en clase de teología.

La semana pasada comencé a dar en la Facultad de Teología de Valencia un curso sobre cine religioso. No es éste un término que a mí me acabe de gustar puesto que lo religioso abarca demasiadas cosas, algunas de ellas bastante espúreas. El curso está organizado como una práctica de los estudios teológicos que están haciendo alumnos y alumnas del Instituto de Ciencias Religiosas que no son seminaristas. Son laicos y algunas religiosas. Es decir que estudian teología no como elemento de su carrera eclesiástica o preparación y requisito del sacerdocio. Esta pequeña asignatura que explico, está dentro de esas ciertas “prácticas” aledañas a la “teoría teológica” como puede ser también por ejemplo el arte o la música religiosa que también se explican.

Verdaderamente lo veo muy interesante por cuanto puede despertar -esa es mi intención y mi objetivo en mis clases-, el deseo de descubrir en el cine y sus historias la búsqueda del sentido de la vida, el deseo de trascendencia que muchas veces sin hacer explícito el nombre divino se nos muestran en muchísimas películas. Y lo voy a mostrar, además de mis explicaciones con secuencias e imágenes de distintas películas, métodos, elementos y pistas para encontrar a Dios en el cine.

He aquí una muestra de parte de lo que voy a explicar hoy en la clase.  


Estilo cinematográfico con sensibilidad teológica

1. El fuera del campo.
2. La construcción del infinito.
3. La música como reveladora.
4. La verticalización.
5. El color como transparencia del misterio. 

6. La luz como presencia y ausencia.
7. El rostro del otro.
8. El instante decisivo.
9. El punto de vista. 












jueves, 22 de abril de 2021

LOS OSCARS 2021, EN TIEMPO DE PANDEMIA

 


El próximo domingo día 25, a la madrugada nuestra, se adjudicarán las famosas estatuillas doradas de los premios Óscar del presente año. Éstos premios comenzaron a concederse a las mejores películas producidas en Estados Unidos ahora hace la friolera de 91 años, allá por 1929, en la transición entre el cine mudo y el sonoro, cuando la industria norteamericana del cine se había consolidado y se había hecho poderosa. Los principales estudios de filmación consideraron la oportunidad de establecer unos premios que estimularan e incentivaran la producción de películas que se había convertido por aquel entonces en un boyante negocio. Antes de la pandemia, la industria del cine norteamericano aportaba un alto porcentaje de ingresos en el producto internacional bruto de la economía norteamericana.

Así que este año de 2021 el cine se ha visto totalmente sumido en una crisis sin precedentes. La novedad es que no solo la ceremonia oficial que se celebra en la ciudad de Los Ángeles va a ser sin paseíllos por la alfombra roja, sin “glamour“, con mucha austeridad y especialmente mediática. los miembros de la Academia del Cine Americano han tenido menos películas para elegir, por lo que la depuración ha sido mas fácil. En este año de la pandemia con muchos cines cerrados se han estrenado menos películas, algunas seguramente quedarán olvidadas en los estantes de los almacenes de los estudios. Otras, que estaban en fase de realización, se han quedado frenadas en su producción. Quizá, también y como siempre, esta crisis del cine tiene sus ventajas: el replanteamiento de nuevos enfoques en la política de producción del cine norteamericano. Y más cuando la intrusión de las plataformas digitales de cine que han sustituido durante estos meses de encierro a las salas de cine, provoca lógicamente en las estrategias de los estudios cinematográficos distintos, radicales y nuevos planteamientos.


¿Sin las salas de cine es posible seguir viendo cine? ¿Una película es menos película si la vemos en la pantalla grande de nuestro salón? A los que nos gusta mucho, mucho el cine, pensamos que la experiencia de la sala de butacas, a oscuras, y llena de espectadores que comparten una misma experiencia de ideas, sentimientos y emociones, es insustituible. En el salón, y en el sofá, rodeados de la familia y con la mascota a los pies, y el móvil abierto, es bien difícil tener la concentración, silencio y dedicación que utilizamos cuando estamos en la sala oscura de un cine.

miércoles, 21 de abril de 2021

EL INSACIABLE APETITO DEL FUTBOL


El insaciable apetito.

Otra vez el mundo del deporte-espectáculo nos presenta un caso más de mal ejemplo para la sociedad. ¡Qué lejos del verdadero espíritu que el deporte bien ejecutado posee! Esa propuesta de Liga Internacional de solo los equipos de futbol más poderosos, más ricos (incluso en deudas), más famosos, ha sido rechazada con espanto por deportistas -sobre todo los que no son de élite, - políticos y prensa, clubes pequeños, con gran espanto y con alto escándalo. Los han tachado de ambiciosos, avariciosas, insolidarios. Un insaciable apetito: Triunfar ellos, ganar aún más dinero y que se fastidien los equipillos que a trancas y barrancas parecen sobrevivir… Yo entiendo nada de futbol, pero yo siento una gran simpatía haca esos equipos de futbol que con pocos medios, estadios “caseros”, futbolistas sin relumbrón, se juegan el alma en sus encuentros: el Almería, el Huesca, el Levante, el Betis… ¡Que alborozo cada vez que derrotan a alguno de los gigantes, que ilusión cuando suben a la primera división…!

Yo, como con todo lo que se refiere al futbol, me quedo atónito y descolocado. Comprendo el rechazo de unos y otros, pero no me escandaliza: el futbol es un negocio descarado -sobre todo a esos niveles de  prestigio- y los equipos de futbol son empresas que siguen los dictados del liberalismo económico y el capitalismo más feroz. Poner zancadillas, eliminar al oponente, desembarazarse de activos molestos que frenan o merman la ganancia debe ser su prática habitual. ¿Quien se atreve a hablar de ética y nobleza de espíritu deportivo?

 

domingo, 11 de abril de 2021

EN EL DOMINGO "IN ALBIS"


 Ha caído el blanco muro 

HA caído el blanco muro

y las altaneras torres enmudecen:

en sus socavados cimientos, 

fresca agua y tierna yerba brotan.


Pues ya los eslabones de las cadenas,

argollas y cepos, cerrojos y grilletes

son derribo de la vida,

herrumbre y sombra del pasado. 


Seguirá tal vez la muerte, 

siendo lo que siempre fue: 

una caricatura de la vida. 

De ella ya esta dicha

la palabra definitiva.


Un camino de reencuentro

se llega hasta el banquete.


viernes, 9 de abril de 2021

LA CANCIÓN DEL COLACAO

 


El fútbol y el racismo

Esta mañana, estando yo en mi lugar de trabajo, y separado por una pared, escuchaba la voz de un albañil que está trabajando en un edificio adjunto en construcción. Los albañiles para combatir y pasar la tediosa jornada de su trabajo suelen muchas veces ponerse una radio con el volumen a toda paleta o cantar a voz en grito. Uno de ellos, al que oía muy bien desde el interior del patio de luces, cantaba con toda claridad y emoción esta mañana la canción del colacao, el famoso anuncio que de críos escuchábamos. Es una canción muy popular pero que denota un cierto tufillo de racismo despreocupado y desinhibido que por aquellos años sucedía.

El racismo: una actitud y un mal hábito que durante siglos hemos tenido en Occidente, pero que como un virus siniestro de esos que siempre viven y nunca pueden ser aniquilados, se alberga en la mente y el corazón de muchas personas. Si uno analiza a fondo en algunas ocasiones algunas actitudes o gestos que realizamos, nos darían el resultado de que todos, todos, todos somos racistas.

¡Que trifulca la que se armado por el caso del racismo reciente en el fútbol! Un futbolista blanco en el fragor de la batalla futbolera, donde las personas pierden sus controles, insulta a un futbolista negro. Las palabras arrojadas como piedras como insulto son odiosas, muy gruesas, intolerables. Gravísimo pecado. La sociedad futbolera se ha rasgado las vestiduras y la cosa va cada vez a más. El futbolista ofendido y su equipo parece que ahora intentan aprovechar la ocasión para anular el partido que habían perdido. Se han hecho puestas en escena en el mismo campo de fútbol para indicar su solidaridad con el insultado.  El insultador dice que él no ha sido, que él no ha dicho esas palabras tan ofensivas. Así que ya veremos.


No es preciso recordar que esto del fútbol es un espectáculo sumamente productivo, un negocio donde unas empresas comercian con seres humanos en sus contrataciones y el factor económico impera sobre el factor humano. Se pide que en este negocio económico, que es el deporte espectáculo, donde las estrellas del futbol destacan muchas de ellas por un tren de vida de lujo escandaloso, sus miembros deben ser caballeros. Habría que ir también a las gradas de los espectadores -ahora no los hay por la pandemia- para ver si desde allí también se profieren insultos de tinte racista. Si los escucháramos, quedaríamos espantados.

Así que nuestro albañil que cantaba (lo hacía bastante bien) “Yo soy aquel negrito del África Ecuatorial ...” con desinhibición y entusiasmo, podría ser denunciado por algún compañero de color que trabajara con él.

miércoles, 7 de abril de 2021

UN CURITA JOVEN LEE A HANS KÜNG

 


Para muchos de los que quizá esto lean, Hans Küng tal vez sea un nombre que nada les diga. sin embargo, para mí, como para muchos sacerdotes de mi generación, es alguien muy importante: en cierto modo ha sido el maestro y tutor teológico de todo lo curas que allá alrededor de la década de los años setenta salíamos del seminario. Yo recuerdo que la teología que nos explicaban allí cojeaba lamentablemente. Aun cuando hubo algunos profesores que estaban al día -habían estudiado en Alemania, en Lovaina- el resto explicaban siguiendo gruesos manuales tomistas con una teología fosilizada. 

Así que al salir del seminario, en los primeros años yo me dediqué en cierto modo a remozar mis estudios teológicos con los escritos que iban llegando al socaire de los vientos del Vaticano II recién finalizado. Las publicaciones de los grandes teólogos que influyeron en el prodigioso concilio por fin nos llegaban. (Me pregunto ahora: ¿qué leen ahora los nuevos curas de hoy?). Yo era por el año 1971 un inquieto curita joven y en medio de febriles actividades pastorales, yo me empapaba de la nueva teología: Schmaus, Rahner, Danielou, Congar, Häring, Chenu,  Sauras, el joven Ratzinger y... Hans Küng. Algunos de ellos después, en la era del tandem Juan Pablo II/Ratzinger fueron perseguidos y entre ellos, Hans Küng, el teólogo suizo, que pronto fue considerado “el garbanzo negro” de la teología, al que se le expulsó de su catedra con arteras técnicas dignas de la vieja inquisición. Era el teólogo díscolo al que el Papa polaco se la tenía jurada.  En verdad, un teólogo díscolo no tiene razón de ser, pues si hay algo esencial en la teología es la obediencia. Ya se sabe, si te sales del redil… ¡palo y tente tieso!

Yo leía, pues, con verdadero interés y placer los libros de Küng que eran verdaderos tochos pero escritos con notable pericia y amenidad. Su tratado sobre la Iglesia, que influyó tanto en el documento sobre ésta redactado por el Concilio, Ser cristiano, ¡Infalible?, una pregunta, Proyecto de una ética mundial, ¿Existe Dios?, … Me acuerdo que me leí este último en el transcurso de una semana corta que estuve en un hospital restableciéndome de una intervención quirúrgica… Hay que decir también que muchísimos laicos cristianos se formaron, leyéndole: muchos de los que ahora no pueden aceptar esta Iglesia... pese al papa Francisco.

Aun cuando la evolución última de Hans Kung, con un enfrentamiento casi total a Roma (y especialmente, a Ratzinger-Papa) a mí no me gustó del todo, hoy rindo homenaje a este teólogo que se derivó al final hacia el ecumenismo y a la creación de una ética universal y al que yo personalmente le debo muchos de mis modos abiertos de entender la fe cristiana y a la Iglesia.

Ayer murió a los 93 años y hoy rezo por su alma. Gracias, maestro.  Descansa en paz.

domingo, 4 de abril de 2021

PELÍCULAS DE ROMANOS



  En los días de semana santa todos tenemos más tiempo que dedicamos a ver la televisión y es que ahora que salir no es muy conveniente. Las cadenas generalistas y también las plataformas ofrecen el fruto de estos días: películas religiosas. Os diré que la mayoría de veces yo huyo de verlas: me espeluznan esas películas bíblicas de barbas y túnicas y que, incluso algunas realizadas en fechas aún muy recientes, la mayoría son de un rancio insoportable.


Supongo que muchos de mis lectores les ocurre lo mismo puesto que nos muestran historias ya tantas veces tratadas que aunque nos cuenten invenciones y disparates en el guion, nuestro gusto está estragado. 

 

Pero tengo yo que decir que en estos días aparte, de algún reportaje sumamente interesante (el que, por ejemplo, pasaron en La2 el miércoles pasado sobre la cuestión del cáliz de la Cena del Señor, que lo sitúan en León -el famoso cáliz de doña Urraca- Y en el que no mencionan el nuestro que se venera en la catedral de Valencia, he visto algunas muy buenas películas que sin nombrar explícitamente a Dios, sin aparecer los polvorientos caminos de Palestina en el siglo primero, ni los felpudos en el casco de los romanos, son cintas verdaderamente acertadas, señalando la trascendencia del ser humano, el deseo de búsqueda más allá de sus límites. Os digo dos títulos: Nomadland y Sound of metal. 

 

jueves, 1 de abril de 2021

EN JUEVES SANTO


 Hoy es jueves santo. En la ciudad, que no es festivo laboral, se nota porque la gente parece andar más deprisa, con deseos de acabar sus faenas, para terminar antes y tomar fiesta y sosiego. Los albañiles recogen todos los cachivaches esparcidos durante la semana pues van a tener unos días de descanso. Las tiendas tienen sus estantes casi vacíos, han vendido las provisiones para estos días de cierre. Los niños no se ven por las calles en su trasiego del colegio a casa o de casa al colegio. 

Y por la tarde las iglesias van abriéndose poco a poco para acoger a los fieles que acuden vestidos con sus mejores galas. El resplandor de la tarde tibia y brillante se cuela por la puerta de los templos. Éstos parecen habitados por una luz especial y por sus vidrieras lucen dorados reflejos.

El jueves santo los cristianos recuerdan el amor de Cristo a todos los hombres, celebrado en medio de la nostalgia de sus últimas horas. Jesús se va y sabe que va a ser trágicamente y barrunta que va haber unas horas muy amargas en donde él no sabrá casi ni dónde poner la mirada. Su corazón, latiendo con fuerza, se despide de sus amigos y les da los últimos consejos, la última voluntad, lo que mejor que el posee: amor que rebosa en su corazón.

Hoy es jueves santo y quizá para mí el mejor día de la semana santa. Respiro un aire suave y armonioso que equilibra y modula los sentimientos de mi alma. El recordatorio de que sin amor todo es muy difícil y que junto a los otros que son mis hermanos solo el amor es posible me acompañan.