sábado, 30 de enero de 2021

HAN CERRADO LOS CINES LYS (POR EL MOMENTO)

 


Se veía venir. Entre las muchas cosas que la pandemia ha producido está el azote mortal a las salas de cine. Los espectadores han desertado prácticamente de ellas. Los exhibidores no presentan además películas de interés que mueva al público general acudir a sentarse en sus butacas. Para paliar la carencia de buenas películas se ha echado mano de algunas reposiciones (como por ejemplo la maravillosa "Deseando amar").


Por el momento pues, se ha cerrado los cines Lys  (tan céntrico, tan concurrido, con esa oferta tan amplia de filmes) y también otras multisalas de Valencia. Yo echo de menos el poder ver una película en una gran pantalla en una sala de butacas con un montón de espectadores a mi alrededor, con los que me siento en comunión con ellos, compartiendo risas, lágrimas y emociones, viendo como la vida que desfila siempre en una buena película por la pantalla. ¿Hay que recordar que no es lo mismo que ver una película en la pantalla de nuestro televisor por muy grande que ésta sea?


Junto a la gran transformación que el cine en sí mismo está sufriendo, mayor que la del inicio del cine sonoro, más grande aún que cuando empezó la competencia de la televisión, yo espero que la crisis de la salas no sea la crisis del cine, sino que éste aproveche este gran cataclismo que tiene encima, se renueve y nos siga ofreciendo esas maravillosas experiencias que todo espectador de una buena película vive.

CONFÍA EN LA GRACIA



confía en ti, se dijo, y sintió que volvía

la frase, confía en la gracia, eso que está

en ti, la nada y el miedo que hay

en ti te ayudarán, y la fatiga, que la energía

vaya a menos, que para quienes quieres

sea leve, la gracia te ayudará


Olvido García Valdés

martes, 26 de enero de 2021

EN LA MUERTE DE D. LUIS IVAÑEZ DE LARA Y TRENOR

 


Hoy han dado sepultura en el Cementerio General de Valencia a mi gran amigo Luis.

El coronavirus cruel se lo ha llevado y ante el desconsuelo, ¿ qué es lo que estoy pensando?  Sé que esto es solamente un paso transitorio de nuestra vida incrustada en la eternidad. Mi amigo, se ha trasladado, desde aquí, al otro lado de la vida, a  la otra orilla donde Dios habita y donde todos nos encontraremos.

¡Cuantas horas de andar juntos, de conversar de muchas cosas, de confidencias espirituales, y sobre todo, de charlar sobre algo que a él le apasionaba: la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Valencia.

El la hizo nacer como fundador y fue testigo activo de aquellos sus primeros años que estaban llenos de ilusión pero también de graves dificultades. Pero él siempre andaba velando por su Hermandad, la sentía como si fuera una criatura suya, siempre preocupado porque siguiera siempre el buen rumbo de una autentica asociación pública de la Iglesia. Su testimonio cristiano de Hermano Mayor fue siempre un magnifico estímulo. ¡Cuantas cosas yo aprendí de él!

Nos ha dejado ahora, que parece que el mundo está dejado de la mano de Dios, pero él sabía que no, que Él siempre tendrá la ultima palabra, “porque los que ahora siembran entre lágrimas, cosecharán entre cantares”.

Yo ahora doy gracias por lo que fue, ya que todo lo que fue es lo opuesto a la muerte y al caos y me recuerda aquello que San Simeón dijo: “Sabes que no morirás porque estás dentro de la vida que sientes entera bullendo en tu interior”.

Detalle del triple mosaico que D. Luis ofrendó al Santuario del Rocío 



viernes, 22 de enero de 2021

POR LAS BARBAS DEL PROFETA (y II)

 


El libro de Eduardo Mendoza “Las barbas del profeta” va comentando uno a uno los grandes momentos de aquella historia de los israelitas que nosotros llamamos Historia Sagrada: Adán y Eva, Caín y Abel, el arca de Noé, el rey David, la historia de José, la historia de Daniel, etc. etc. El autor en su comentario -respetuoso con los que creen estas historias- va intercalando entre ellas citas de las películas clásicas y alguna que otra puya sarcástica de ese su humor tan propio. Pero no mucho, cosa que nos hubiera gustado más.


También dedica las últimas páginas al Nuevo Testamento, pero se le nota que apenas tiene interés por él. Más aún dice que la figura de Jesucristo a él, cuando niño, no le era muy simpática ni atractiva. (¿Qué maestro, qué cura se la enseñaría?). Naturalmente para una persona descreída, todo esto le lleva sin cuidado y hasta le parece pueril. Tampoco hay que irse muy lejos a los terrenos de la no creencia.


Hay muchos que se dicen católicos cuya fe aprendida de niños se quedó anclado en su infancia. Y la fe que en estos momentos tiene es tan infantil que no se sostiene al encontrar al tropezarse con cualquier argumento histórico o científico adulto. Sin duda Eduardo Mendoza no tiene fe cristiana y si la tuviera estaría al nivel de la llamada “fe del carbonero”. Escribio mucho y escribió muy bien: espero que su próximo libro esté a más altura .


jueves, 21 de enero de 2021

POR LAS BARBAS DEL PROFETA (I)

 


Un decepcionante libro de Mendoza: “Las barbas del profeta”.

Las barbas del profeta “ su último y breve libro, parece escrito con desgana, como engendrado imprevistamente como un hijo de la vejez. Quizá ya la alta edad a la que ha llegado le ha incitado a rememorar las impresiones, emociones y recuerdos de la Historia Sagrada que aprendió cuando era niño en aquellas precarias y tristes escuelas de la posguerra que yo también conocí (me llevo sólo tres años con el escritor de Barcelona). Me recuerda también aquel verso de Antonio Machado recordando su infancia en la escuela con una lámina en la pared de Caín matando a Abel.

Seguramente y tal vez debido a la edad, Eduardo Mendoza en los últimos libros que va escribiendo parece perder fuelle. Aunque sigue con su formidable y fresco estilo narrativo -es un narrador tan potente como Cervantes- la lectura de sus últimos escritos decepciona bastante: su humor que casi parecía inocente y agudo, y su espíritu crítico, casi han desaparecido.

 

Eduardo Mendoza afirma haberle influido enormemente en su trayecto literario, aquellos  pasajes de la Historia Sagrada tal y como se enseñaban (y se siguen enseñando en muchos colegios píos, ay)  y que ahora no soportan una lectura mínimamente rigurosa  y más cuando la exégesis bíblica actual ha entrado a saco en ellas. De todos modos, siguen siendo muchas de ellas y literariamente hablando, una pura maravilla. Leerlas hoy con mentalidad ya muy adulta, o de vuelta de todo, tiene sus riesgos y es que pierden ciertamente la ingenuidad poética de la edad infantil en las que se leía.

 

Ya el título “Las barbas del profeta“ me parece un equívoco, puesto que la expresión “por las barbas del profeta” hace referencia no a la historia sagrada cristiana sino que es una expresión propia de la religión musulmana. Las barbas son las de Mahoma, no las de Isaías… Espero que los musulmanes no lo tomen a mal.

 

lunes, 18 de enero de 2021

A VECES CUESTA CREER

 


A veces, cuesta creer. Aunque algunos vivan tranquilamente su fe en Dios, para muchos creer en Él está lleno de dificultades. Es como aquel combate cuerpo a cuerpo que Jacob tuvo que librar contra el ángel de Yahvé. 

 

Uno de los obstáculos es precisamente los que me rodean, la sociedad en la que vivo. 

Y muchas veces uno se calla el nombre de Dios porque los que no creen te hacen sentir un bicho raro. Te da miedo la burla, y también la crítica que se hace a los torpes ejemplos que los malos (y buenos) creyentes realizan.

 

No es fácil creer en ti, Señor.

 

En un mundo que dificulta el reto y el arrojo que es creer en un Dios Invisible, que como rostro tiene el de Jesucristo, Tú mismo, Dios, a veces eres un obstáculo, porque han manchado tanto tu rostro, han desgastado tanto tu historia, han devaluado tanto la palabra de tu nombre…

 

Por eso, entre dudas y evidencias, lejanías y proximidades, no hay que rendirse, no hay que dejarse llevar: porque creer en Ti es una gran aventura, un reto difícil, una decisión que se abre al final a ese horizonte de luz que esperamos.

 

¡Qué profunda alegría, entonces, qué seguridad en medio de la nada, qué pasión profunda es creer en Ti! Pues tú te haces presente, me cautivas y me seduces cada día, y a contracorriente me haces mirar tu rostro reflejado en el amor a los demás 

 

jueves, 14 de enero de 2021

"PASIÓN DE LOS FUERTES", EL ALIVIO DE LOS CLÁSICOS.

 


 El alivio de los clásicos


Antes de anoche pasé una velada muy feliz contemplando en la pantalla grande del televisor la película "Pasión de los fuertes" que John Ford realizó en 1946. Su título original es «My Darling Clementine», y alude además del nombre de una de sus protagonistas -la dulce novia de Doc Holliday- a la canción que se canta varias veces en la película. Es una maravilla. Ando algo hastiado del cine que se hace en los últimos años y hay pocas cosas que realmente me interesan. Buscar en las plataformas audiovisuales a veces te abruma y te pierde entre tantas ofertas. Por eso acudo de vez en cuando al refugio del cine clásico que, aunque ya muchas veces visto, siempre me aporta gran placer e ideas nuevas.


«Pasión de los fuertes» no es sólo un western, sino que gracias a la sabiduría y arte de el gran director John Ford (¿el mejor director de la historia del cine?) es un filme que nos plantea la problemática de la construcción de un estado de derecho en una nación como eran los incipientes Estados Unidos donde muchas veces se recurría a la violencia para establecer el orden (¿está ocurriendo ahora lo mismo). La película, adema de entretener de verdad reflexiona sobre la muerte y la vida, y habla sentimiento de culpa y de la necesidad de redención, de la nobleza de la amistad, del sentido de la fraternidad y de la paternidad, del arte (aquí, la poesía y el teatro) como alivio y freno a la brutalidad, de la mirada compasiva a los pobres…


Dos momentos inolvidables en «Pasión d los fuertes», ademas del mítico duelo en OK Corral: la recitación del monólogo «To be or not to be»  en la cantina y el baile que se marca en la fiesta de la iglesia en construcción Wyatt Earp, el gran Henry Fonda.


miércoles, 13 de enero de 2021

LA DULCE FILOMENA


Hay algunos frotándose las manos, no por el frío de la ola de ídem que nos invade, sino de satisfacción por el tratamiento que los medios de comunicación han dado a estas nieves desmesuradas y estos hielos congelantes. Por unos cuantos días numerosos las televisiones «han distraido» al personal de los muchos y graves problemas que el país sufre y que en el mundo también ocurren.


Las imágenes que se nos mostraban en las pantallas de televisión eran repetitivas (un locutor o una locutora, la mayoría de ellos becarios, abrigados de arriba abajo, como si llevaran burka) y muy coincidentes sobre todo las de Madrid (parecía que sólo había nevado allí) y que se nos mostraban a modo de bucle. Los locutores de la meteorología daban una vez y otra el tiempo y explicaban los mapas con la satisfacción que da el haber acertado esta vez en sus pronósticos.

Quedaban muchas veces en su segundo plano el grave asunto de la pandemia que parece enloquecida y furiosa, el asalto al Capitolio que aunque lejos de nosotros es un hecho histórico que va a tener consecuencias universales, la gente que no cobra los Ertes, la vacuna tan urgente y que no llega, la subida de la luz y los hosteleros reivindicando derechos a costa de ls riesgos…


Y así la pésima gobernanza que nuestros políticos están dando, parece haberse emblanquecido por la nieve o congelado por el rigor de los hielos en las noticias de los informativos. Los políticos o desaparecidos, o cambiando de criterio cada dos hora o la greña con sus opositores… ¡Qué bien, cómo se frotan las manos!


«El aspirar del aire, / el canto de la dulce filomena, / el soto y su donaire / en la noche serena, / con llama que consume y no da pena», escribió San Juan de la Cruz, refiriéndose al ruiseñor. También para algunos esta borrasca Filomena ha sido un dulce ruiseñor…


martes, 12 de enero de 2021

OTRO GOL A LA IGLESIA A FAVOR DE LAS MUJERES

  


 ¡Este Papa tan grande, sigue metiendo goles! Esta vez a favor de las mujeres en la Iglesia: mujeres en el lugar que les es debido y corresponde en la Iglesia. La última de este Papa Francisco -bendito sea- ha sido, aunque parezca un paso muy pequeño, una puerta más entreabierta en ese edificio en el que todos vivimos, la Iglesia, y donde el empeño de muchos, la ha convertido un edificio, ruinoso, incómodo y cerrado. El Papa Francisco autoriza oficialmente en el Motu Proprio Spiritus Domini y reconoce como un ministerio eclesial que las mujeres puedan ayudar en la celebración de la misa y de la liturgia -junto al diácono y el sacerdote- y que también puedan leer la Palabra de Dios en la asamblea litúrgica.

 

Alguien pensará: ¡pero eso ya lo hacían!. Sí, pero en cierto modo era algo más particular (hay obispos y curas que en sus diócesis no permitían el acceso a las mujeres al presbiterio si no era para barrer y fregar…). Lo importante es que a partir de ahora las mujeres pueden ir acercándose más al sacerdocio, aunque choquen con todas las prevenciones que el Vaticano impone. 

Éste ya ha salido advirtiendo de cualquier malentendido. Aclara que no es paso hacia la ordenación sacerdotal de mujeres, sino un gesto para reforzar el papel de los laicos. De hecho, con la publicación de este cambio Francisco recuerda “La Iglesia no se considera autorizada a admitir a las mujeres a la ordenación sacerdotal”.

 

En julio de 2013, dijo: “En cuanto a la ordenación de las mujeres, la Iglesia ha hablado y dice no. Lo ha dicho Juan Pablo II con una formulación definitiva. Esa puerta está cerrada. Pero sobre esto quiero decirles algo: la Virgen María era más importante que los apóstoles y que los obispos y que los diáconos y los sacerdotes. La mujer en la Iglesia es más importante que los obispos y que los curas. ¿Cómo? Esto es lo que debemos tratar de explicitar mejor”.

 

¿Cómo es posible que lo que es un clamor en el mundo por la lucha por la dignidad e igualdad de las mujeres, la Iglesia siga con los oídos taponados para no escucharlo?

 

viernes, 1 de enero de 2021

EN EL PRIMER DÍA DEL AÑO

 


Mi bendición para el año nuevo.

Es ésta una plegaria de bendición que suelen rezar los cristianos de Irlanda. Yo la he adaptado y que con ella, os bendiga Dios.


Que los caminos se abran a tu encuentro 

que el sol brille sobre tu rostro,

que la lluvia caiga suave sobre tus campos,

que el viento sople siempre a tu espalda.


Que guardes en tu corazón con gratitud

el recuerdo precioso de las cosas buenas de la vida. 

Que todo don de Dios crezca en ti, 

y te ayude a llevar la alegría a cuantos amas.


Que tus ojos reflejen un brillo de amistad, 

luminoso y generoso como el sol, 

Que la fuerza de Dios te mantenga firme,

que los ojos de Dios te miren,

que los oídos de Dios te oigan,

que la palabra de Dios te hable, 

y que su mano te proteja.


 Y que, hasta que volvamos a encontrarnos,

Otro te tenga y nos sostenga a todos,

 en la palma de su mano.