sábado, 20 de abril de 2024

LA FOTOGRAFÍA DEL HORROR

 


El premio a la mejor fotografía del año dado por la Asociación de la Prensa Mundial, es como casi siempre una instantánea de las guerras que inundan este nuestro mundo. Este año la foto está tomada en Gaza Y se titula “Una mujer palestina abraza el cuerpo de su sobrina”. En verdad es una imagen que a la primera visión te conmociona enormemente, pero me temo que la belleza (¿¡) de dicha imagen, borre la terrible tragedia que no solamente sufre esta desconsolada mujer, sino la de todo un pueblo que está siendo aniquilado por causa de los intereses de las grandes potencias del mundo.

Pues la imagen es prácticamente abstracta: el blanco del sudario que cubre el cuerpo de la niña muerta, el manto azul añil de la mujer que lo sostiene y el ocre marrón del pañuelo que cubre su cabeza. No vemos más, ni siquiera el rostro de tristeza provocada.

Y es que esta sociedad en la que estamos viviendo que se nutre sobre todo de la imagen, está anulándo la capacidad de vivir la realidad tal y como es: porque el dolor y el sufrimiento  son horribles y la muerte sobre todo, si es violenta, es fea y nos repugna. Aunque la intentemos falsear con imágenes esteticas y  bellas. 

viernes, 12 de abril de 2024

NO CÓMO, SINO POR QUÉ

 


No cómo, sino por qué

 

¿Por qué la cruz,

la sonrisa,

la herida profunda?

 

¿Sabes?

Está tan claro 

cuando se ama…. 

 

Un poema del poeta polaco Jan Twardowski: Una crucecita para el camino

viernes, 5 de abril de 2024

CIUDAD VIGILADA

 

Lliria, ciudad vigilada 

 

EL OTRO DÍA me quedé ingratamente sorprendido, viendo como unos obreros con la ayuda de una gran grúa instalaban en un edificio de la Plaza Mayor una cámara de vídeo que enfocaba a la calle.

 

Supongo que es algo del Ayuntamiento. Me dio pena que esto, tan poco positivo y que uno puede pensar que sólo ocurre en las ciudades de algunos países, donde la democracia brilla por su ausencia, para así mejor controlar a los ciudadanos, se haga también en mi pueblo de Llìria. Desde luego, lo más seguro es que los vecinos que viven alrededor del campo de visión de la cámara, podrán ser controlados cuando entran y salen de sus domicilios y quienes son sus visitantes.

 

Es verdad que agradecemos a veces la instalación de este tipo de cámaras, sobre todo, cuando se comete un delito y entonces es tan fácil descubrir a los delincuentes. Nos sentimos más seguros, pero, ¡qué precio más alto hay que pagar!: poco a poco, los ciudadanos, nos vamos sintiendo más acorralados por ese gran Ojo, que todo lo ve que es como el del Gran Hermano, del cual ya preanunciaba en su novela distópica, “1984”. El escritor inglés, sin duda se quedó ya bien corto en su profecía.

miércoles, 3 de abril de 2024

PASÓ LA SEMANA SANTA

 


Ya pasó la Semana Santa. En algunos lugares de España las gotas de la persistente lluvia se han disuelto  en las lágrimas de muchos cofrades. Algunos lloraron con fe y devoción pero supongo que otros sencillamente porque se les había aguado la fiesta. Ya pasó la Semana Santa, ¡uuf!

lunes, 1 de abril de 2024

RECUERDO DE EMILI MARÍN

 


Ha mort, Emili Marín. Ahir dia de la Resurrecció del Senyor, es va unir a aquest en la seva victòria contra la mort. Torna a la vida eterna de la qual havia sortit feia 82 anys. A mi m'agradaria que aquestes paraules meves que escric en el seu homenatge, fossin totes escrites en valencià, la llengua que tant estimava i per la qual va lluitar, però jo sóc castellano-parlant i per això prefereixo expressar-me en la meva pròpia llengua materna. Sé que des de dalt, ell m'escussarà.

 

Emilio Marín era alcoyano y estuvo estuvo durante algunos años al servicio de la parroquia de Pedralba y se ganó a todo el pueblo. Allí tenia una casita donde a veces se retiraba descansar de los ajetreos de la ciudad. Él fue para mí uno de esos amigos a los que llamo, agridulces. Tuvimos una relación amistosa constante que nos llenaba de alegría cuando estábamos juntos, aunque a veces nos separábamos un poco cuando nuestros puntos de vista y criterios chocaban. Nos enfadábamos, pero nunca nos ofendíamos. Colaboré con él durante varios años, llevando la página de cine de la revista SAÓ, cuando él la dirigía y en algunas otras  publicaciones, como el libro de homenaje a Ovidi Montllor. Con su humor e ironía, nos hacía reír …y pensar. 

 

Emili Marín fue un hombre de frontera: Como creyente, estuvo siempre en primera línea y en contacto con los que se sentían fuera de la iglesia y mostró a muchos de ellos, que era posible tener fe en Jesucristo y a la vez ser un hombre ilustrado sin renegar de la inteligencia y de la cultura.

 

Yoeso era posible, porque Emili era además de un hombre fe era un hombre de diálogo, que amaba tanto a la Iglesia que le hacía ver también sus claros fallos y defectos y  que sin duda buscaba la reforma de ésta no en los códigos y leyes anquilosadas, sino en las aguas claras del Evangelio de Jesús de Nazaret, el resucitado. Siempre en la frontera, siempre con un buen humor, llevaba con entereza en sus últimos años, la limitación de haber perdido el sentido de la vista. 

 

Yo voy a echar mucho de menos a Emili que ahora estará,  seguro, haciendo reir a Dios.

viernes, 29 de marzo de 2024

¿PARA QUIEN ES VIERNES SANTO?


 

¿PARA QUIEN ES VIERNES SANTO? 

 

La mano que cierra piadosa los párpados del moribundo que ha muerto.

El grito del enfermo que delira: “¿Por qué me has abandonado?”.

La casa que se derrumba bajo una bomba en Gaza.

El hombre que anda pensando en el suicidio.

La oscura soledad de un anciano que vive solitario.

El muerto que yace oculto entre piedras y matorrales.

El que cae en la más honda depresión: “ Todo se ha consumado

Aquel que ni siquiera siente la compañía de Gamaliel, su ángel confortador.

La muchacha, que es brutalmente violada en el portal de su casa.

La madre, que camina al cementerio a poner flores en la tumba de su hijo.

El moribundo que musita: “En tus manos encomiendo mi espíritu”.

El aria de Bach: “Erbarme dich, mein Gott” (Ten piedad de mí, Dios mío”)

El que escucha como un susurro: “Hoy estarás conmigo en el paraíso

 

lunes, 11 de marzo de 2024

"CASA DE NINES" EN LLÌRIA

 



Ayer domingo, por la tarde estuve viendo una obra de teatro interpretada por un grupo de aficionados, vecinos de Liria. Se titulaba "Casa de nines" de Henrik Ibsen.


Fue una gran función la que nos regalaron estos amigos, por cuanto el nivel de interpretación su puesta en escena fuero estupendos, casi de profesionales. Para mí a la vez constituyó una especie de reto por cuanto irme sólo al teatro, superando las barreras arquitectónicas y otros problemas personales propios de mi enfermedad era un pequeño desafío. Me daba un cierto reparo el acudir a ver la función. Salió todo muy bien. Además de pasar un buen rato viendo las vicisitudes de Nora, la protagonista de la obra que al final decide emanciparse como mujer fue también una satisfacción personal, por mis logros personales de normalizar mi situación convaleciente..


Mi empedernida y casi exclusiva cinefilia ha motivado que durante mi vida asistiera pocas veces al teatro, y eso que considero a éste con una de las más antiguas y bellas artes de representación de la vida. (Es verdad, en cierta manera, el cine es también otro arte "más fácil" de contemplar que el teatro, puesto que en éste la palabra tiene más importancia, aunque el auténtico cine bien realizado es tan profundo y difícil como un espectáculo teatral.


También asistí por la ilusión que tenía de volver a ver «Casa de muñecas» porque es una obra a la que tenía especial cariño pues cuando era muy joven (unos 18 o 19 años) la dirigí en el Hogar parroquial de la Asunción con un grupo de jóvenes que llevaba nuestro querido  don Bejamin Peinado, aquel vicario tan querido, con los cuales hacíamos libro-fórums, teatro, comentarios de discos, etc.. ¡Ya en los años 68, nosotros representábamos una obra con alta sensibilidad, feminista, de defensa de la mujer, reprimida y encarcelada en el matrimonio!


sábado, 9 de marzo de 2024

FALLAS Y LÁGRIMAS


 





El año pasado
, por circunstancias de mi vida, no me enteré absolutamente de que en los primeros días de marzo empezaban a celebrarse las Fallas. Eran días de encierro en hospital.

 

Cuando vivía en Valencia, mi domicilio estaba en medio de una calle, en cuyos extremos (no más que a doscientos metros cada uno) se plantaban dos fallas. No podéis imaginar el bullicio continuo y el ruido estruendoso en las casi tres semanas que dura este evento festivo y que transforman en interminables los días de la celebración de las Fallas. Pero también, como a mí que me gusta respetar las costumbres, tradiciones, hábitos de los demás, he aprendido a campear las molestias (charangas, petardos a deshoras, verbenas que acaban a las tres de la madrugada, calles cerradas al tráfico…) que las agrupaciones falleras provocan. Y más cuando yo disfruto tanto del

 

Así pues, este mes de marzo ya convaleciente e incorporado a la vida cotidiana, también me he encontrado con cierta sorpresa, porque casi no lo recordaba que en la ciudad de Llìria, donde habito, también hay fallas. Y muchas de las agrupaciones falleras pasan por mi calle, pero la altura de la vivienda, en la que vivo y desde el balcón, me permite verlas desfilar a vista de pájaro y no padecer las molestias que acarrean. 

 

El sábado pasado, por no ir más lejos, pasó uno de estos desfiles. No eran muchos los falleros y acababan su procesión con una banda de tambores. Era muy destacable como aporreaban éstos: con un ritmo y un sentido de la composición magnífico. Hay que decir que los que componían la formació (todos muchachos/as jóvenes) resplandecían ilusión y entusiasmo.

 

Cuando pasaban, de pronto, me quedé más que sorprendido al ver que de mis ojos salían lágrimas que se precipitaban naturalmente hasta el suelo. ¡Estaba llorando, “su música” me llenó de emoción, porque pensé que esto, después de mi gravísima enfermedad yo ya no lo vería! Una y otra vez tengo que agradecer a Dios y a los amigos que le echaron oraciones por mí, que me sacaran del pozo donde había caído, para ver contemplar de nuevo la vida. 

miércoles, 6 de marzo de 2024

SÓLO (ORACIÓN)



Señor, no te pido
 esa otra soledad más difícil.
cuando rodeado de la muchedumbre, 

me siento único y sólo,

incluso rodeado de tantos que me quieren

y cuando de mí ya nadie se acuerda

Te pido esa soledad auténtica

que solo se siente en el alma, 

cuando me hablas a través de mí,

y sólo mi corazón te siente


martes, 5 de marzo de 2024

ESTOY DESEANDO VOLVER A SAN FRANCISCO

 



 

ESTOY DESEANDO volver a San Francisco, es decir, al templo  de mi parroquia, para celebrar Misa. Lo necesito. Pero últimamente, dos importantes problemas que atañen a mi salud, retardan mi regreso. El primero es que hace tres semanas tuve que volver al Hospital de Llìria, donde fui ingresado, por un problema de estómago. Sondado en el estómago, estuve cinco días postrado en la cama, en ayunas, que me debilitaron mucho. (¡A perro viejo, todo son pulgas!). 

 

Gracias a Dios, voy poco a poco recuperándome.La otra dificultad que quizás sea más bien psicológica, es que me caí al suelo en el altar en plena celebración, delante de toda la feligresía  -imaginaros el grito unánime, que escuché-. Y el tercero es lo complicado que es entrar en el templo por los escalones que hay y después, subir después al altar. 

 

Miguel Cano el sacristán, amortiguando el golpe al caer, me ayudó muchísimo, pero me retrae psicológicamente mucho ahora el acudir a la celebración de la santa misa. Voy a ver si me animo un poco más y tomo aún más precauciones. De todos modos, misituación va poco a poco mejorando. Y perdón, queridos amigos. por la matraca que os doy con mis problemas de salud.

 

sábado, 2 de marzo de 2024

¿DOS PASOS ADELANTE, UNO HACIA ATRÁS?


Esta es la sensación que he viví hace dos semanas en el proceso de mi salud. Un problema gástrico me obligó a ingresar en el hospital de Llìria. De lunes a viernes. me colocaron una sonda gástrica para desalojar todo lo que ensuciaba mi estómago y así limpiarlo.

 

Fueron cinco días más que de dolor físico, de sufrimiento psicológico. Pero todo se ha solucionado estupendamente. Por fortuna no fue así, toda la analítica y las consta ntes vitales fueron correctas. Temía que a pesar de todo, iba a volver a ocurrir lo mismo que hace más de un año sucedió. Pero sentí otra vez el miedo y la soledad del que del que está enfermo. 

Acostumbrado a Portacoeli, donde conocía a todos los celadores, enfermeras y médicos aquí no conocía a nadie. 

 

Obligado a ayunar estrictamente, de pronto me encontré que sin querer, lo hice en el Miércoles de ceniza. Un ayuno largo obligado: desde el lunes hasta el viernes no tomé bocado. Ahora estoy de nuevo en mi casa, muy debilitado pero he notado que he perdido gran parte de lo que había ganado en rehabilitación. Paciencia y ofrenda al Señor.

miércoles, 31 de enero de 2024

¿POR QUÉ NO UN CRISTO JOVEN?


El cartel que se ha confeccionado este año para anunciar la Semana Santa en Sevilla ha creado gran polémica. En él aparece pintado con un gran realismo, el cuerpo casi desnudo de un joven, sin apenas restos de las heridas, llagas y hematomas de la pasión. Se trata de representar a Cristo resucitado. Hasta aquí yo no veo nada nuevo. En el arte pictórico y escultórico de la Pasión de Jesús, hay muchas esculturas que prácticamente representan lo mismo: el cuerpo de un hombre muy joven. Como el artista se imagina a Jesús, en el supremo acto de la redención. ¿O no es la Pascua el estado de la juventud eterna?

Contemplemos, por ejemplo, dos muestras que no difieren gran cosa con el ya famoso cartel sevillano: el Cristo de Velázquez y la escultura de un Jesús muerto, que recoge en su seno, una Madre jovencísima -la virgen María- en el magistral grupo escultórico de la Pietá de Miguel Angel. También las vírgenes de los pasos de la Semana Santa de Sevilla que parecen muchachas en flor del barrio de Triana. Ambos coinciden en lo que se acusa al artista creador de este cartel gráfico que anuncia la semana Santa de Sevilla. Que si es un Jesús demasiado joven, que si desprende un cierto erotismo gay, que si no representa la esencia del misterio cristiano que es el Cristo sufriente y “padecedor” y que se exhibe en las procesiones de Sevilla.


El artista autor de dicho cartel ha intentado mostrar un Cristo que no es el de la pasión, sino el Cristo de la resurrección.  Saliéndose de la corriente tradicional de este tipo de arte pictórico, coincide con el imaginario popular (y teológico) sobre la Resurrección de Jesús: de la tumba emergería un Cristo con un cuerpo juvenil y “fresco”, sin las trabas del sufrimiento anterior ni la derrota de la muerte. Un Cristo con la carne glorificada (como dice San Pablo que serán nuestros cuerpos cuando resucitemos). ¡El hombre viejo, que da paso al hombre nuevo! Un modo de representar lo que es de por sí  irrepresentable, ya que la resurrección de Jesús es algo más que un hecho histórico. Es una experiencia invisible de la fe de los primeros discípulos. No vieron resucitar a Jesus, pero sí que sintieron su vida y su presencia posteriormente a su muerte.


Quieren ahora, tras denuncias, retirar el cartel. Están recogiendo firmas.

Pienso que no es para tanto, y aunque personalmente dicho cartel no me acaba de gustar, creo que esto debería ser una polémica más. Alguien me susurra al oído: ”¡Así es Sevilla y el mundo de las cofradías!”



viernes, 26 de enero de 2024

MADRE E HIJO

 


Los vi el otro día, por la calle donde ahora, por causa de mi convalecencia deambulo forzosamente más despacio. Ello me obliga a mirar las calles que transito con mayor atención que si fuera un viandante normal. Ahora advierto las grietas, los baches y también la suciedad que hay en las aceras de mi querido pueblo que es Lliria.


Decía que los vi el otro día. Era la barrendera que se encargaba de recoger muchas cosas desagradables que los ciudadanos abandonamos en la calle: colillas, cacas de las mascotas y otras, más soportables, como son papeles, bolsas de plástico y demás. Colegí que la que estaba haciendo ese ingrato trabajo  era una mujer musulmana: vestía falda larga y velo en la cabeza.  


Pronto observé que detrás y a veces delante de ella, iba un niño de siete u ocho años subido a un patinete que impulsaba con el pie. La mujer de vez en cuando, al tiempo que recogía la basura y  barría, echaba constantemente la mirada sobre aquel niño. Era una madre y trabajadora que al no poder dejar a su hijo al cuidado de otra persona, lo llevaba consigo al trabajo. Enseguida me emocioné ante tal estampa que expresaba el amor maternal, y pensé de nuevo, lo difícil que es en estos tiempos que corren, la responsabilidad de la familia. Y sobre todo, el oficio de ser madres para las mujeres.


El niño adelantaba o retrocedía cn el patinete alrededor de su madre, alegre y dichoso por sentirse a su cuidado. Yo también estaba muy contento por ver a una mujer, inmigrante musulmana, a la que el la empresa del Ayuntamiento había contratado. Quizá sea un trabajo ingrato, pero muy digno.

sábado, 20 de enero de 2024

NO TENGO NI PLATA NI ORO

 


Ayer mismo por la mañana salí a andar con mi paso vacilante, guiado por el andador, para comprar algunas cosas que me hacían falta, pero sobre todo, para ejercitarme en el andar en este tiempo de recuperación que me estoy dando.


Cuando estaba cerca de Correos, una persona de mediana edad, vestido discretamente -no parecía un mendigo-, se me acercó preguntándome si tenía algún objeto de oro o plata para vendérselo.  Antes, pensé cuando se acercaba a mí que era un pedigüeño más. Su requeirimiento me dejó un tanto sorprendido por cuanto este tipo de peticiones no suelen darse en la acera de la calle.


No se no supe qué responderle en aquel momento. Le dije que no llevaba nada de plata ni oro encima. El señor muy amablemente me contestó que no me preocupara. Y me deseó al verme inestable y sostenido por el andador, que me pusiera pronto bueno y añadió: «le voy a tocar el hombro para que tenga suerte y se restablezca pronto». 


A la vez y en ese momento me acordé que llevaba un anillo de plata donde está escrita la oración del Padrenuestro; me lo saqué del dedo anular y se lo regalé. El hombre, muy educado me lo agradeció y yo seguí, tambaleante, mi camino. Al punto, me  acordé del pasaje de los Hechos de los Apóstoles  (Hc 3, 6-8 ) donde Pedro, a un pobre mendigo tullido, que se le acercó para pedirle limosna, le contestó: «no tengo ni oro ni plata, te doy lo único que poseo: la fe en Jesucristo», y al punto, se puso en pie.


Así pues salvando las distancias: ni yo soy Pedro, ni el tullido era el señor aquel que salió a mi encuentro, ni hubo milagros, pero en cierto modo, coincidió en algo muy importante: que hay que mirar a los ojos de aquellos que nos piden algo, aunque no podamos dárselo. Porque la solidaridad es algo muy importante en nuestras vidas. Aunque no seamos muy creyentes.


lunes, 15 de enero de 2024

OCURRENCIAS

 


De mis lecturas: 


En el Evangelio se nos da la ley de la libertad.

Somos tratados como hijos, no como criados. No estamos sujetos a un código de mandamientos formales, sino que se nos habla como a quienes aman a Dios y desean agradarle . John H. Newman.


¡Oh Dios, si hay Dios, salva mi alma, si es que tengo alma!


Hay que vivir la relación con Dios llena de amor y alegría. La fe no debe envejecer. Nuestra iglesia está atascada en pellejos y fórmulas viejas y por la nostalgia de lo que si siempre ha sido así. No podemos dejar que el evangelio se vuelva una pieza de museo. Yo le pido al Señor luz para saber qué es que lo que tiene que cambiar y lo que ha de permanecer.


sábado, 13 de enero de 2024

VEINTE DÍAS DE VIDA NORMAL.


YA HACE veinte días que salí del hospital. Antes de ello, el gran deseo de estar ya en la calle quedaba amortiguado por el miedo a saber si conseguiría adaptarme a las casi olvidadas formas cotidianas de la vida ordinaria . Porque abandonado el cuidado extremo, eficaz y cariñoso que me dieron en el hospital, tendría que valerme yo sólo. !Pues en ello estoy! Trabajosamente y más despacio de lo que yo quisiera, voy a adoptándome a las nuevas circunstancias.


Pero junto a estas dificultades están también estas pequeñas alegrías y satisfacciones: pasar con mi andador por la puerta de un colegio y oír la algarabía de los niños a la hora del recreo, celebrar la Eucaristía con mi comunidad parroquial, ir a comprar a mercadona, tomar un café con algunos amigos, superar algunos obstáculos de las aceras que parecen insalvables, saludar a mucha gente que se preocupó por mí…


Sé que los médicos hicieron mucho por mí, al igual que mis familiares, y amigos y también mi propia voluntad. ¡Me siento un superviviente! Por eso doy las gracias al Dios que sana en el que estamos todos. "Proclama mi alma la grandeza del Señor"


jueves, 4 de enero de 2024

¿PAPÁ NOEL O REYES MAGOS?

 


Papá Noel vs. Reyes Magos.


Me mandaba el otro día un cercano familiar mío que vive en Sevilla, una fotografía que tomó seguramente en una de las calles de la siempre pintoresca y bella ciudad andaluza: un vecino había puesto unos carteles y pancartas donde expresaban su preferencia por la tradición de los Reyes Magos, y el rechazo implícito a Papá Noel. 


La verdad es que la fachada de la vivienda de tal ciudadano sevillano parece una declaración de principios y con sus carteles también una trinchera, (” ¡No pasarán”!)  y un modo de descalificar la costumbre de muchos países europeos, de hacer regalos el día de Navidad, y que sea papá Noel un personaje legendario y típico Así pues, algunos rechazan esta costumbre porque no es una tradición nuestra y porque, dicen, es mucho más secular, por ende, protestante. 


Pero Papá Noel, tiene también un gran sentido cristiano: el 25 de diciembre celebramos el gran regalo (mayor aún que con el que obsequiaron los Reyes Magos), que fue el que hizo Dios a la Humanidad; Jesús de Nazaret el hijo de Dios y de María la Virgen. ¡Menudo regalo y bien venido Papá Noel! 


Sin embargo, los Magos de Oriente, como debería decirse, puesto que en los evangelios nunca se dice que sean reyes, regalaron al niño Jesús recién nacido oro, incienso y mirra. En recuerdo de eso, en la tradición religiosa y cultural de los países europeos del sur -mayoritariamente católicos- su costumbre es hacer en el día 6 de enero los regalos. Si nos fijamos bien en el fondo es lo mismo y tal vez tenga el inconveniente para los papas que tengan que doblar de nuevo los regalos…