EL BUEN SAMARITANO Y EL "OPEN ARMS"

«Patrulleros italianos impiden que el barco Open Arms, que lleva a bordo a 147 inmigrantes rescatados en altamar, amarre en el puerto italiano de Lampedusa. La ministra de Defensa italiana se enfrenta a la prohibición de Salvini y respalda la entrada del barco por «humanidad». Son mis últimas noticias.

Lo del Open Arms es una gran vergüenza para la humanidad y, en particular, para Europa. Todos mirando para otro lado e intentando quitarse el marrón de encima. La acomodada Bruselas, la próspera Alemania, la feliz Francia, la orgullosa Inglaterra, los países del sur europeo (entre ellos, España) que antaño también conocieron la tristeza y penuria de la emigración no sólo quieren cerrar las fronteras sino también las puertas de su corazón humanitario en aras a una política racional migratoria que nunca llega. ¿No se trata de leyes, sino de humanidad!  Mientras, que se ahoguen, que se pudran en las pateras y en los barcos heroicos que al menos los recogen.

Si aquel samaritano, que vio en la cuneta al malherido -como nos cuenta Jesus de Nazaret- hubiera hecho lo mismo que el sacerdote y el levita -pasar de largo- tendríamos un muerto más, un ahogado más.

¿Qué inmensa vergüenza! ¡Dios, baja a esta tierra y rompe las conciencias blindadas de tantos de nosotros, que sostenemos a los políticos!