Estuve la mañana del domingo pasado en la toma de posesión del nuevo pastor de la Iglesia Evangelista Bautista, en la calle Quart y que no dista ni cien metros de donde está mi parroquia. Me invitó al solemne culto su pastor Pau Grau, que me visitó unas semanas antes de este acto tan personal e importante para él. Pau es una persona relativamente joven, muy abierta y agradable, de la que seguramente yo voy a disfrutar mucho con su amistad.
Me sentí muy bien acogido y a gusto siguiendo este rito solemne de Culto que estuvo muy bien preparado y ejecutado -cantos, prédicas, oraciones y discursos- y que en esta ocasión, el pastor prefiere llamar "Encomendación pastoral" y no "Toma de posesión" pues ésta da a entender dominio o posesión sobre los feligreses. Estoy totalmente de acuerdo. Me alegró también contemplar cómo otros hermanos y hermanas -el templo abarrotado- viven su fe en Jesucristo de un modo muy concreto y hermoso que sin duda nos une a todos los que creemos en Jesús de Nazaret, el Resucitado, el único Señor.
Así como le agradezco la deferencia que ha tenido conmigo, le deseo al nuevo pastor Pau y a su esposa e hijas, venturoso futuro presidido y bendecido por el Señor y muchos logros pastorales. Rezo por tanto por él.
¡ Que grato es ver una Parroquia Cristiana tan llena de fieles. Fieles a Jesús. ¿Que pasa en nuestras Parroquias Católicas? ¿ Porqué están cada vez más vacías?
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