¡Ya he regresado del pais del imperio que domina al mundo! Pero no he vuelto convenciod de su poder. Como todos los imperios, América es un gigante con pies de barro. Se mantiene en lo alto porque sabe que muchos quieren derribarla e intenta constanmente buscar cúales son sus debilidades para protegerlas.
Nueva York es la ciudad del guigantismo, de los colosos, de los contrastes, del abigarrameinto de razas. Está totalmente vigilada, pero la presencia policila no se siemnte amnexzanta, sino como algo natural. No se ven muchos retratos de Obama, no hay culto a la personalidad. (Sí que eso lo noté, en plan de propaganda politica, en Filadelfia y en Whasington).
Esta visita a América me ha gustado muchisimo, ha sido una experiencia "flipante": sus calles de lujo y sus rincones más humildes,la gente que transita por las aceras, los variopintos comercios: todo invita a la convivencia y a la tolerancia
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