Todos los años,
la comisión diocesana de enseñanza no se envía por un cartel para que lo
coloquemos en el cáncer de nuestras iglesias. Y te intenta anuncia el cartel la
invitación a inscribirse a los chicos en la clase de religión.
Naturalmente,
esta invitación está dirigido a los niños y adolescentes que en edad escolar.
Se entiende que el cartel debe ser estimulante, juvenil, alegre y Su diseño debe conseguir que
llame la atención y llene de ilusión al que lo lee porque la clase de religión
debe ser Entretenida y hasta divertido divertida.(De eso algo sé, puesto que he
sido profesor de esa asignatura durante
30 años).
Pues ahí arriba
tenéis la fotografía de dicho cartel: no puede ser más desafortunado, menos
imaginativo, y con unos mensajes más tópico. No es tan difícil hacer un cartel
que puedan superar a éste. Luego nos quejamos de que la Iglesia no sabe
comunicar
No hay comentarios:
Publicar un comentario